Desde el 14 de octubre, el Museo del Cincuentenario de Bruselas abre sus
puertas a la estética indígena brasileña. 234 grupos étnicos, 180 idiomas, el
Brasil de los Indios es una tierra calidoscópica. Así se expone en la capital
belga algunos 300 objetos que permiten evaluar la diversidad estética de los
750 000 indios de la Amazonia.
La vida de los indios cambió desde los años 70. Si los lugareños todavía
hablan su lengua, los jóvenes utilizan el portugués para dirigirse a los
turistas. Hoy en día, estos jóvenes también se van a vivir en la ciudad, pero
siempre vuelven para las ceremonias comunitarias del pueblo. Se trata de una
afirmación de su identidad. Sus ritos actuales son más esplendidos que antes,
con más perlas y plumas.
El gobierno brasileño invierte mucho dinero para la supervivencia de los
pueblos indios. Los Tikuna (35 000 personas) y los Kayapô (8500 personas)
constituyen unas de las tribus más importantes; las otras sólo se componen de unos
doscientos individuos. Como los Kayapô, los Ka’Apor, los Bororo y los Karaja
son los mejores en cuanto al arte de la pluma.
Sin embargo, la exposición de Europalia no se resume a plumas. Tres
elementos tipos de una sociedad india están desarrollados en la exposición: la
supervivencia diaria con, entre otros, el hábitat; la construcción del hombre,
individual, étnica, distinta según las etnias; y la relación de los individuos
con el no humano (plantas, animales, visión de los otros, chamanismo, etc.). Generalmente,
los objetos expuestos son contemporáneos y todavía sirven, como unos testigos
de la cultura material actual de los indios. A lo largo de los años, estas
plumas, cerámicas, máscaras y estos instrumentos de música no han perdido nada
de su calidad.
Indios no Brasil, Museo del
Cincuentenario, desde el 14 de octubre hasta el 19 de febrero, de martes a
domingo, de 10 a 17h.
En Australia es un gran país de 7,4 millones de km² que mantiene relaciones
de intercambio con Papúa-Nueva Guinea. Su clima es muy inhóspito, así que la mayoría de la gente vive a lo largo de las costas. En el norte, donde se ha
creado un centro de información sobre la genealogía aborigen, se encuentran las
poblaciones indígenas Torres Strait Islanders.http://www.ausanthrop.net/
Los principios de la colonización británica y del declive aborigen tuvieron
lugar en 1788. Durante los 50 000 años antes de esa colonización, había
una gran diversidad cultural y lingüística en Australia. Existían más de 200
idiomas y 600 dialectos. Entre 300 000 y 1 500 000 indígenas repartidos
de manera irregular vivían en el continente con una proporción de
1 hab/15 km². Hoy en día, solo quedan 50 idiomas por 50 000
locutores.
A estos grupos se les califican de tribu, pero no se trata de un término
apropiado porque no representa a una estructura social. De hecho, las
comunidades resultan de una reagrupación de personas que provienen de distintos
lugares y cuyas lenguas difieren. Los aborígenes solo utilizan el nombre de
« tribu » cuando quieren negociar sus derechos o su propia administración.
Dreamtime, el mundo sagrado
El Dreamtime es la visión que tienen los aborígenes del mundo y de su
creación. El Dreamtime es el
principio del conocimiento, del que provienen las leyes de la existencia. Estas
leyes deban ser respetadas para que el ser humano pueda sobrevivir.
Ese momento del Dreamtime pertenecía
a los antepasados, seres sobrenaturales que, literalmente, emergieron de la
tierra. En esa época, el planeta era llano y oscuro, como un mundo silencioso, muerto.
La vida todavía estaba dormida por debajo de la superficie. Luego, el sol se
levantó y la luz apareció para la primera vez.
Los antepasados eran medios humanos que parecían a criaturas o plantas.
Viajaron, lucharon y cambiaron el aspecto de la tierra, dando forma al paisaje,
a los ríos, los arboles y los hombres. Crearon la hormiga, el agila, la
serpiente, etc. También inventaron los cuatro elementos naturales, así como el
sol, la luna y las estrellas. Una vez su misión terminada, volvieron a su
estado de sueño. A veces, sus espíritus se transformaron en piedras o arboles,
que por su parte se convirtieron en lugares sagrados.
Para más informaciones sobre el arte aborigen australiano, véase esas páginas:
Reflexión sobre la imagen cinematográfica como medio de expresión de la
ciudadanía aborigen
A menudo, la temática aborigen forma parte del cinema australiano. Las
películas y/o las ficciones realizadas por los indígenas aparecen en 1955-60,
cuando se tomó conciencia de los daños que sufrieron esas comunidades. Solo hay
dos o tres directores aborígenes. En 2009, la película Samson & Delilah de Warwick Thornton obtuvo la Cámara de Oro en
Cannes. Se trata de una producción marginal y reciente en el cine aborigen. Por
su parte, Rabbit-Proof Fence (en
castellano: Generación robada),
llevada al cine por Phillip Noyce, es la adaptación de un libro que cuenta una
verdadera historia, la de una niña raptada. Esa película marca una toma de
conciencia colectiva, porque su éxito dio a conocer internacionalmente uno de
los episodios más vergonzosos de la historia australiana del siglo XX. Ahora
vamos a tratar de eso con un poco más detalles.
En 1931, cuando tenía
14 años, Molly fue separada de su familia, como casi 100 000 otros niños
mestizos (a menudo de madre aborigen y padre blanco), robados a sus padres
entre 1869 y 1970 para ser asimilados por la sociedad blanca de origen europeo.
Molly, quien escapó del albergue gubernamental Moon River, recorrió 1500
kilómetros a pie para volver con su madre. Es su hija quien, en 1996, puso por
escrito la vida de su madre en el libro Following
the rabbit-proof fence.
En 1869, la ley (el Aboriginal Protection
Act) autoriza el gobierno a coger los niños mestizos. La razón oficial es
de garantizar el bienestar de éstos integrándolos a la comunidad blanca. http://foundingdocs.gov.au/item-sdid-22.htmlEn 1901, se hace de Australia una federación. La Constitución estipula que no
se contará a los aborígenes en el censo. En 1905, se vota el Aborigines Act según el cual el Jefe
Protector es el tutor legal de cada niño mestizo de menos de 16 años.
En la década de los 30, cuando todas las leyes se armonizan al nivel
federal, se explicita el objetivo de acelerar la desaparición de los aborígenes. En 1948, la Declaración Universal de los
Derechos Humanos es adoptada por la ONU y apoyada por Australia. Sin embargo, los raptos perduran. En 1967, gracias a un referéndum, se
reconoce la ciudadanía australiana de los indígenas, que desde entonces pueden
votar.
En 1969, todos los Estados de Australia deciden abolir la ley que permitía robar
a los niños. Una comisión de encuesta sobre la separación de las familias aborígenes
da como consecuencia el informe Bringing Them Home.
Ése revela que frecuentemente los niños no podían hablar su idioma, para
que así olvidaran sus orígenes. También según este informe, el 17 % de las
niñas y el 8 % de los niños fueron víctimas de abusos sexuales dentro de
las instituciones de acogida o de las familias adoptivas.
El 26 de mayo de 1998, en Sídney, tiene lugar el primer Día Nacional del
Perdón. Más de un millón de personas caminan en las calles para expresar su
tristeza y su remordimiento, y así llegar a un proceso de reconciliación nacional (National Sorry Day).
En 1999, el Parlamento aprueba una moción de “profundo y sincero arrepentimiento
por la separación por la fuerza de niños aborígenes y sus familias”. No
obstante, el primer ministro John Howard se niega a pedir perdón de manera
oficial a los aborígenes, en nombre del Estado australiano. Hay que esperar hasta el 13 de febrero de
2008, en Canberra, para obtener excusas oficiales por parte del gobierno,
representado por Kevin Rudd:
“Por el dolor, el sufrimiento y el daño de estas generaciones robadas, de
sus descendientes y de las familias que dejaron atrás, pedimos perdón.
A las madres y los padres, los hermanos y las hermanas, por romper familias
y comunidades, pedimos perdón.
Y por la indignidad y degradación perpetrada sobre un pueblo digne de
orgullo y una cultura digna e orgullo, pedimos perdón.”
« Inuit » (singular « inuk ») es el nombre de los pueblos que viven en la zona árctica, o sea en
Groenlandia (cuyo estatuto de autonomía interna existe desde 1979, pero que
todavía está bajo jurisdicción danesa), en Canadá, en Alaska, y en Siberia
Oriental. Sin embargo, sólo Canadá elaboró una política de reconocimiento para
los Inuit, dándoles unos territorios autónomos. Hay cuatro zonas inuit en
Canadá: el Inuvialuit, el Nuvanut, el Nunavik y el Nunatsiavut. El Nuvanut es
un verdadero territorio (parecido a una provincia) con una entidad
administrativa propio. El Nuvavik forma parte de la provincia de Quebec y, por lo tanto, esta menos avanzado
administrativamente.
En el terreno demográfico, los Inuit constituyen
un pueblo joven. Conocen muchísimos problemas para encontrar trabajo, lo que
favorece las adicciones a la droga y al alcohol. La economía de los Inuit fue
modernizada así como sus técnicas de caza. Las estadísticas del gobierno
canadiense de 2001 indican que el 70% de la población del Nuvanut todavía
practica actividades de cosecha.
Los Inuit viven en una zona ecológica bastante difícil, y el saber se
pierde cuando no hay relaciones con el exterior (ya que el saber se reactualiza
constantemente). Por lo tanto, fueron establecidas universidades inuit donde
los ancianos y antropólogos se ponen al servicio de los más jóvenes. Así, éstos
aprenden el arte de la caza, de la pesca, y los dialectos inuit que, sin esos
profesores, desaparecerían, dado el carácter oral de esas tradiciones.
Reflexión sobre la imagen
cinematográfica como medio de expresión de la comunidad inuit
Atanarjuat, la leyenda del hombre veloz, por el director
Z. Kunuk, 2001, fue recompensada en Cannes con el premio de la Cámara de Oro. La leyenda del hombre veloz es muy famosa en la isla de Iglulik
(isla donde se encuentran los iglús).
La película cuenta la oposición entre dos chamanes. El papel del gran espíritu auxiliar es el del chaman
hábil, seductor, que perturba los seres humanos. Es un chamán del Sur a quien
nadie conoce. El otro acoge al primero, le da de comer y una cama. El
chamanismo, grupo de creencias y prácticas tradicionales preocupadas por la
comunicación con el mundo de los espíritus, es un tema tabú desde 50 años (más
o menos) porque, de 1940 a 1945, los Inuit fueron bautizados y los chamanes
convertidos al cristianismo.
Los concursos de canto
Se trata de competiciones de cantos satíricos escritos y aprendidos por las
familias. En el día del concurso, los cantos empiezan con el sonido de los
tambores. El objetivo es ridiculizar a su oponente.
Los torneos de fuerza
Son torneos de boxeo inuit. Los hombres juegan a las tabas para decidir de
quién dará el primer golpe. Luego el primer da un codazo en la sien del otro y así
sucesivamente hasta que el oponente le agradezca o muera.
La poligamia
Los mejores cazadores tienen grandes familias, poseen varias mujeres. Ya
que traen muchos animales, necesitan a numerosas personas para hacer el
trabajo: quitar la piel, coser, fabricar la ropa, poner suelas a las botas,
cocinar, etc. Cuanto más sea un hombre buen cazador, más podrá reproducirse.
La ropa
La base de la ropa proviene de la piel de caribú, con los pelos en el
interior. Según las estaciones, los Inuit añaden ropa de foca que colocan encima
de su ropa interior. También existe ropa de pájaros para los pobres. La ropa
más decorada bien pertenece a las mujeres de los mejores cazadores, bien sirve
para las ceremonias. La ropa permite distinguir el estatus de vida: madre,
marido, esposa, etc.
Los tatuajes
Puesto que se trata de un criterio de belleza, son obligatorios para las
mujeres que empiezan a adornar su piel a la adolescencia. Para realizarlo, se
utiliza una pica de marfil y una mezcla de hollín y grasa. En general, se hace
a lo largo de un año, que es el tiempo necesario para tatuar la cara, los
hombros, los pechos, los muslos y los brazos hasta las uñas.
Los nombres
Los Inuit no tienen apellidos, sino un único nombre personal que se da de
manera indiferente tanto a los hombres como a las mujeres; el género no existe.
A menudo, a los bebes se les da el nombre de un difunto, así puede dar la idea
de reencarnación.
La televisión inuit
Rebosa de historias humorísticas. Los actores de cine representan unos Inuit
contemporáneos. Super chamou, una serie de tres capítulos, es muy apreciada
y siempre emitida. Cuenta la vida de una especie de Superman inuit que acude en
auxilio de los niños en peligro.
También se emite unos concursos de muecas para animar un poco a los
habitantes de ese gran territorio donde los Inuit pueden sentirse muy solos. La
televisión es, de algún modo, su manera de comunicar entre sí y de recibir
noticas de los otros. Eso les permite mantener el contacto puesto que no hay
carreteras, conocen tres meses de noche polar y una temperatura de alrededor de
-60°C.
En otro programa de Inuktitut, llamado That’s
funny, un anciano recuerda su infancia cuando todos los Inuit vivían juntos
dentro de sus iglús. El APTN es una
cadena de televisión que trata de las culturas del Gran Norte. Además, se puede
ver un programa culinario para aprender recetas (de hígado de foca por
ejemplo).
El idioma inuit se pierde un poco porque los jóvenes (un 1/3 de la
población) solo ven cadenas de televisión anglófonas, lo que no les alienta a
aprender la lengua antigua.
Nanook of the North (Nanook el esquimal) es una producción antropológica
de Robert Flaherty de 1922 que representa una realidad que, infortunadamente,
desapareció.